¿Qué pasaría si nunca pasase nada?

Así cuestionaba y justificaba una campaña de la C.A.M. las obras en Madrid, intentando hacernos creer que el crecimiento demográfico, es decir, más consumo, más coches, más carreteras, más contaminación, más ruido, más estrés, etc.. son cosas positivas para aumentar la calidad de nuestras vidas.... con lo bien que víviríamos si fuésemos pocos. A más población más necesidades y por lo tanto más negocio, más crecimiento económico ¿no?... crecimiento sin límite, "cuanto más mejor", esa es la "libertad" sobre la que algunos hacen ideología y filosofía de vida, "libertad" para transformar toda la belleza viviente en objetos y dinero, egoismo y destrucción sin límite, sin juicio moral y sin castigo. ¿Por qué los gobiernos permiten la destrucción Natural? pues supongo que es porque los gobiernos son marionetas amigas del capital y ambos son legitimados a través de una cultura materialista que se difunde por los medios de comunicación capitalistas y que se imita socialmente. ¿Qué podemos hacer para no colaborar en todo esto?.... la cultura la creamos cada uno de nosotros con nuestra actitud y ésta crea todo lo demás, si no tomamos conciencia de las actitudes con las que directa e indirectamente provocamos o fomentamos daños a la Naturaleza y a sus miembros, y si no damos ejemplo modificando dichas actitudes por otras más inteligentes, es decir, más sensibles, entonces recogeremos lo que hemos sembrado generación trás generación y lo que sembramos día trás día, que no es otra cosa que nuestro propio holocausto como especie animal.

Dicen que en la Edad Media una ardilla podía cruzar la península Ibérica sobre las copas de los árboles sin tocar el suelo... eso es lo que pasaría si nunca hubiese pasado nada.

"El árbol que mueve algunos a lágrimas de felicidad, en la mirada de otros no es más que un objeto verde que se interpone en el camino. Algunas personas ven la Naturaleza como algo ridículo y deforme, pero para ellos no dirijo mi discurso; y aún algunos pocos no ven en la Naturaleza nada en especial. Pero para los ojos de la persona de imaginación, la Naturaleza es imaginación misma. Así como un hombre es, ve. Así como el ojo es formado, así es como sus potencias quedan establecidas." William Blake - Carta al Dr. Trustler (23 agosto de 1799)